El secreto está en el azúcar moreno, en la masa y en la forma de hacerla y trabajarla. Sigue nuestra elaboración paso a paso y comprobarás lo fácil y rápido que es cocinar tu pizza cubana.
Es importante que la masa se despegue de tus manos en su punto final, pero calibrando su grado de dureza. En la pizza cubana la masa debe quedar esponjosa y manejable, por tanto deberás ir agregando harina extra si ves que no tiene la consistencia ideal.
Os presentamos una pizza con sus ingredientes más clásicos, quesos gouda y mozzarella, jamón york y, por supuesto, una buena salsa de tomate que envuelva la masa. Dejamos a gusto del cocinero la posibilidad de hacerla con vegetales o, por ejemplo, gambas.
La pizza cubana tiene dos horneados; el final y uno previo a muy poca temperatura para que la masa suba antes de incorporar el resto de ingredientes. Y en esta sí puedes poner piña.
Empieza a hacer la masa
Echa el azúcar moreno y la levadura en la taza de agua tibia y remueve hasta que estén disueltas en el agua lo más posible. Reserva durante unos minutos.
Tamiza la harina
En un bol echa las dos tazas de harina tamizándola para que quede lo más suelta posible. Agrega la sal.
Une los ingredientes
Vierte en la harina la taza de agua con la levadura y el azúcar poco a poco y ve integrando con las manos hasta acabar tu masa.
Echa el aceite
Una vez que la masa sea consistente echa el aceite vegetal e intégralo añadiendo poco a poco la harina que le haga falta hasta que deje de estar pegajosa.
Amasa
Pon un poco de harina en tu superficie de trabajo y amasa durante unos 5 minutos agregándole harina si hace falta. Debe quedar esponjosa pero sin que se pegue en tus manos.
Pon la masa en una bandeja para hornear
Engrasa el recipiente y extiende la masa en él. Ten en cuenta que la cantidad de masa te dará para tres pizzas individuales.
Primer horneado
Pon las masas en el horno durante unos minutos con una temperatura baja para que la masa suba.
Pon el resto de ingredientes
Saca la pizza del horno y pon 2 cucharadas de salsa de tomate extendiéndola por encima. Agrega el jamón cocido, el queso gouda y el queso mozzarella.
Horneado final
Con el horno precalentado cuece tu pizza durante 20 minutos aproximadamente a 180º. Termina el horneado con un gratinado de 3 minutos.